Servilletas de Nochevieja
30 unidades
Los manteles protegen la superficie de la mesa y convierten cada desayuno, comida o cena en una ocasión especial. Lisos o estampados, antimanchas o no, navideños o para todos los días: en nuestra selección hay un mantel para cada estilo, cada estación y cada momento. Descubre una colección de textiles de cocina diferentes, pero siempre asequibles.
Diviértete y sorprende a tus invitados con combinaciones inesperadas de manteles, servilletas, manteles individuales, vajillas y utensilios de cocina, entre otros. Opta por un efecto de mezclado para una composición alegre e informal, o elige algunos elementos a juego para una cena romántica. ¡Deja espacio para la fantasía!
¿Quieres que cada momento en la mesa sea especial? Entonces, será mejor que dispongas de un surtido de manteles bonitos y prácticos. Aquí tienes algunos consejos para elegir los textiles imprescindibles para tener a mano: textil de cocina y textil de comedor.
El lino es sin duda un buen material, pero difícil de mantener blanco, planchado y limpio con el paso del tiempo. Por suerte, existen muchas alternativas de bajo mantenimiento, como los manteles de algodón, microfibra o poliéster. Son fáciles de planchar, se pueden lavar incluso a 60 °C y, en algunos casos, están tratados para que también resistan las arrugas y las manchas. Compruebe la composición del mantel en el embalaje y/o en la etiqueta del tejido adherida al propio producto.
¿Qué tamaño debe tener el mantel para cubrir la mesa? Lo ideal es que el mantel sobrepase 30 cm por cada lado de la mesa. Si tienes una mesa cuadrada de 100 cm², por ejemplo, el mantel debe medir 130 cm. Lo mismo ocurre con los manteles redondos: calcula el diámetro de la mesa que deseas utilizar y añada 60 cm a la medida del mueble. Ten en cuenta que, gracias a este exceso, un mantel redondo también puede cubrir bien una mesa cuadrada y viceversa.
¿Aperitivo de verano, cena de Nochevieja o la comida del Lunes de Pascua? Los colores pastel son perfectos para los meses de primavera, los colores lisos son ideales para alegrar las fiestas "de etiqueta", mientras que los estampados se adaptan a las ocasiones con amigos o a las fiestas infantiles. Nuestra selección de manteles se actualiza constantemente para adaptarse a todas tus ideas: déjate sorprender día tras día por nuestros productos de calidad y al precio más bajo. Aquí tienes algunos ejemplos.
Mantel de Navidad. A menudo, los momentos más maravillosos de la Navidad se viven en torno a la mesa, cuando toda la familia se reúne para cenar el día 24 o comer el 25. Añade un poco de color a estos momentos mágicos con un mantel de Navidad. Si prefieres un estilo refinado o si ya tienes un centro de mesa vistoso, lo mejor es un mantel liso. Marfil, rojo rubí o verde bosque son algunas de las opciones más clásicas y siempre impactantes. Si, por el contrario, la vajilla y los adornos no son demasiado elegantes, puedes animar la puesta en escena con un mantel estampado. ¿Cascanueces, campanillas y agujas? Diviértete eligiendo.
Mantel de Pascua. La Pascua es tiempo de tonos pastel y colores suaves. Espacio para manteles en blanco marfil o rosa antiguo, si no, motivos florales para recordar la naturaleza que se despierta en el exterior.
En la mesa, el mantel antimanchas representa la máxima practicidad combinada con la belleza estética. Entre mil colores o tonos lisos, facilita la vida cotidiana y despreocupa los desayunos, las comidas y las cenas, porque si se derrama un vaso de vino tinto o un cuenco de aceitunas, no es necesario limpiar ni pretratar el tejido. Basta con un poco de papel secante o una toallita.
Los manteles antimanchas pueden ser de poliéster, microfibra o algodón recubierto, es decir, sometido a un proceso de plastificación (con teflón o resinas acrílicas) para que sean 100% impermeables. De hecho, los tejidos no se manchan. Conservan su aspecto fresco y como nuevo, lo que prolongan la vida de los manteles antimanchas y facilitan todas las operaciones de lavado. Porque los tejidos puede lavarse cómodamente en ciclos cortos y a baja temperatura, ¡una forma estupenda de ahorrar energía!
Los remedios específicos y la rapidez de acción son esenciales para eliminar las manchas de los manteles. Aquí tienes soluciones para las manchas más difíciles y frecuentes.
Las manchas amarillas se forman en los manteles que han permanecido demasiado tiempo en el cajón. Humedezca la zona afectada con alcohol rosa y luego friegue con jabón de Marsella o con un desengrasante a base de jabón de Marsella, que encontrará entre los limpiadores de superficies. Aclara bien y deja secar el mantel al aire libre, preferiblemente en un lugar bien ventilado, pero no bajo la luz directa del sol, ya que los rayos UV tienden a amarillear los blancos y a apagar otros colores.
Calienta la plancha, coloca un trozo de algodón o papel encima de la cera y luego la plancha. Repite la operación hasta que desaparezca la mancha, después procede al lavado normal del mantel a máquina. Si lo deseas, añade unas gotas de lejía para un resultado impecable.
Pulveriza zumo de limón sobre la mancha y luego frota la mancha de vino tinto con jabón de Marsella. Una alternativa también puede ser verter agua con gas.
Hay muchos remedios para las manchas de café (por suerte), pero uno de los más eficaces sigue siendo la lejía. Vierta un poco directamente sobre la mancha y déjela actuar durante 10 minutos, después continúe con un ciclo de lavado normal. ¿La mancha ya está seca o persiste? Deja el tejido en remojo toda la noche.